Extractos traducidos de un articulo llamado “20 preguntas“ escrito por J.A.B.
En tal día de tanto error como hoy (y éste aumentando), y sabiendo de la Biblia que “los malos hombres y los engañadores, irán de mal en peor“ y que “en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus de error y a doctrinas de demonios;“ (1Ti 4:1); y además sabiendo que ni solo “en los postreros tiempos“ sino “en los postreros días vendrán tiempos peligrosos:“ y errores más espantosos abundarán y serán ocultados con “apariencia de piedad“ (2 Ti 3:1-6), ¿No deban los hijos de Dios escudriñar las Escrituras diligentemente, para aprender si hay errores entre las varias sectas con las cuales están unidos, o quitando los errores o apartándose de estas sectas? Para llamar atención sobre este asunto grave, ruego con cariño a los cristianos entre los denominaciones, considerar en espíritu de oración los puntos siguientes que deshonran al Señor y hacen daño las almas de creyentes e incrédulos igual. No deseamos herir los sentimientos de ninguno de los hijos amados de Dios, mas en amor sincero para ellos y nuestro bendito Señor, preguntarles las siguientes preguntas, confiando que sean usadas de Él para su bendición y Su gloria.
1. Las Sectas. – ¿Debería un hombre o mujer cristiano(a) – quiero decir cristianos verdaderos – juntarse con una secta o iglesia criada por voluntad humana, viendo que la Palabra de Dios denuncia severamente, solemnemente, y enfáticamente todo que es de carácter sectario? Deje que la Palabra de Dios salga en defensa de sí mismo. “Porque todavía sois carnales, pues habiendo entre vosotros celos, y contiendas, y divisiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres? Porque diciendo el uno: Yo cierto soy de Pablo; y el otro: Yo de Apolos; ¿no sois carnales? “ (1 Cor. 1:10,11; 3:3,4)
2. Nombres Sectarios – ¿Debería un hombre o mujer cristiano(a) tener tales nombres sectarios como “Presbiterio“, “Bautista“, “Metodista“ o “Luterano“ etc., viendo que tales nombres divisorios parten y fragmentan el cuerpo de Cristo? No se encuentran estos nombres en las Escrituras sino son condenados por la Palabra de Dios. Como está escrito: “quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; pues yo de Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo. ¿Está dividido el Cristo? ¿Fue colgado en el madero Pablo por vosotros?“ “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy en medio de ellos.“ (1Cor 1:12,13; Mat 18:20)
3. Observando la Cena del Señor Cada Semana – ¿Debería un hombre o mujer cristiano(a) asistir a un modo de adoración que eche al lado la observación de la Cena del Señor cada semana, y solo la hace cada mes o solamente unos pocos veces al año – como si no fuera un bendito privilegio tenerle en memoria a menudo (cada Día del Señor)? “El primer día de la semana, reunidos los discípulos para partir el pan“ (Hechos 20:7) claramente nos enseña que era costumbre entre los apóstoles observar esta cena cada semana. Oh fiel hijo amado de Dios, le ruego seguir en pos de la Palabra de Dios y no de las tradiciones de hombres fallados. (2 Thes 3:4; 1 Cor. 21:2; Hechos 20:7)
4. Los Dones del Espíritu de Dios – ¿Debería un hombre o mujer cristiano(a) hallarse juntado a una secta donde los dones y derechos soberanos del Espíritu Santo están estorbados y aún negados? Dios le ha dado Su Espíritu Santo a cada creyente (1 Cor. 12:7) para el provecho de todos, y dice a Sus hijos, “Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros“ (1 Pedro 4:10). Ya que hay “diversidad de dones“ estos dones se deben usar sin resistencia, según la gracia que Él nos da. Pero en los denominaciones nadie puede hablar ni orar excepto el ministro o pastor, a menos que él le llama a hacerlo. Y esto ocurre aún en la Cena del Señor, cuando hay de hacer plena libertad por el ejercicio de estos dones del Espíritu de Dios como nos enseña en 1 Cor. 14. ¿No es grave error dejar que un hombre sea la cabeza de la iglesia y por su posición calle la boca de cada otro creyente? ¿Hermanos, debe ser esto así? (Ef. 4:10-12; 1 Cor. 14:31)
5. Ordenación de Pastores por Pastores - ¿Hay algún ocasión en las escrituras en que vemos un pastor ordenando a otro? En el Nuevo Testamento sólo los apóstoles ordenaron o, como en caso de Tito, los mensajeros de los apóstoles ordenaron en nombre de ellos. En estas situaciones sólo los ancianos (no pastores) fueron ordenados y siempre es plural – nunca se ordenó sólo un anciano en una ciudad. Pero hoy día no tenemos apóstoles ni sus mensajeros para ordenar y por eso no tenemos autoridad para que ordenemos pastores en las iglesias modernas. Algunos versículos nos muestran que los hermanos en las iglesias predicaron sin ninguna ordenación humana: 1 Cor. 16:15-16, Hecho 4 y 8, 1 Pedro 4:10, Gal. 1.
6. Una Iglesia Llamando a un Pastor - ¿Hallamos en la Palabra de Dios algún ejemplo de un grupo de cristianos o una iglesia (sea grande o pequeño) escogiendo, llamando, o poniendo sobre sí un hombre como pastor o anciano? Si el cristiano no puede hallar un ejemplo semejante en las escrituras, ¿porque lo sigue haciendo? ¿No es Cristo “cabeza sobre todas las cosas a la iglesia“ (Ef. 1:22)? ¿No nos ha dicho “todos vosotros sois hermanos“ (Mat. 23:8)? ¿Por qué, pues, conforman los hijos librados por Dios a una sistema humana que está llena de tanto error, causando conflictos entre hermanos y estorbando la obra del Espíritu Santo en la asamblea de los santos? (Lea Ef. 4:1, 1 Cor. 12, Rom. 12).
7. Juntando en Iglesias Locales - ¿Debería algún hijo de Dios juntarse con cualquiera iglesia (aunque sean piadosos) o a cualquiera doctrina (aunque sean según las escrituras) cuando por hacer esto Cristo no está reconocido como el Centro divino de congregación? Por hacer esto, muchos cristianos pierden Su bendito presencia en medio de ellos, el cual es prometido únicamente a los que congregan a Su nombre. No es la voluntad de nuestro Señor que su pueblo sea aislado los unos de los otros, sino que sea congregados en asambleas locales – “no dejando nuestra congregación“ (Heb. 10:25), sino recibiendo otros cristianos en comunión y ejerciendo disciplina según las escrituras. Él nos ha dado Su nombre por el Centro divino, asegurándonos que “donde están dos o tres congregados en Su nombre,“ Su presencia está en medio de ellos. Lea Mat. 18:20, Rom. 14:1, Hechos 11:26-28, Heb. 10:25, 1 Cor. 5:1-5. Pero congregar en nombres de denominaciones no es congregar al nombre de Cristo.
(En lo que he dicho aquí no quiero ofender en ninguna manera mis hermanos en Cristo, quienes se encuentran en posiciones como pastores y administradores de las iglesias – están en una sistema que no es bíblica y por eso hacen cosas que nunca hubieran hecho de otro modo. Yo conozco su situación, siendo hecho ciego por esta sistema por muchos años; pero agradezco a Dios que me ha mostrado la salida de estas cosas, para que pudiera ver y andar en la verdad que se encuentra en Él. Espero que este folleto sea usado por el Señor para dirigir mis hermanos a estudiar estas cosas de la Biblia con mucha oración, y que sus ojos sean abiertos para que vean los errores en estas sistemas humanas y asimismo que vean la Verdad que es en Cristo.)
Que Dios dé gracia a Sus hijos en estos últimos días para que dejen del hombre (Is. 2:22) con todo su orgullo y ambición, y seguir en pos de Cristo y Su Palabra a toda costa. Como las denominaciones se han hecho un “campamento,“ los santos deben recordar las palabras del apóstol a los hebreos: “Salgamos pues a él fuera del campamento, llevando su vituperio.“